En su última intervención, en principio prevista para responder al portavoz socialista, José Antonio Alonso, Rodríguez Zapatero fue "extraordinariamente breve" y se centró en agradecer el respaldo del Grupo Socialista.

"Seguiré trabajando con toda fidelidad al programa y al proyecto que representa en nombre de 11 millones de españoles", dijo desde la tribuna a la bancada socialista.

Formuló además a los otros grupos una "invitación a la colaboración, al entendimiento, al acuerdo, para afrontar las serias y graves dificultades económicas y de empleo". "Superemos las dificultades", "hagamos un esfuerzo especial, hagámoslo pensando en los ciudadanos, en los que no tienen trabajo, porque sin duda contribuirá a un resultado positivo para el futuro de nuestro país", les dijo.

Aseguró que el Gobierno pondrá toda su sensibilidad, esfuerzo y trabajo pensando ante todo en las personas y las familias que más dificultades tienen, quienes carecen de empleo, especialmente jóvenes y mujeres.

El presidente reiteró además su empeño en reforzar la educación, en defender los valores de la solidaridad, y en expresar su confianza en el futuro del país para dotarlo de mayor prosperidad y de una igualdad activa e integradora. "¡A la tarea!", espetó a los diputados.

Después, en los pasillos del Congreso, el presidente no quiso responder a la pregunta de quién cree que ha ganado el Debate, porque en su opinión el objetivo es que la sesión sea útil para resolver los problemas de los ciudadanos.