En la sesión de control al Gobierno en la Cámara Alta, el portavoz de la Entesa Catalana de Progrés, Carles Bonet, aseguró que hoy por hoy la colaboración con la ciencia es escasa, pidió explicaciones de por qué programas como el INGENIO no han sido consultado con las comunidades autónomas y reclamó medidas para paliar el déficit de investigación frente a Europa.

Bonet bromeó con el presidente explicándole que dudó si preguntarle hoy por la educación o por la ciencia y señaló que, finalmente, optó por la ciencia, quizá "iluminado por el Espíritu Santo".

En subvenciones a la Iglesia católica, dijo el portavoz de la Entesa, "estamos entre los primeros de Europa pero muy por detrás en inversiones en ciencia e investigación". A juicio de Bonet, "somos la reserva espiritual de occidente, pero sólo la reserva espiritual".

El presidente del Gobierno dijo que España tiene como reto superar la media europea en I+D+i. Según explicó, los mayores problemas con los que se enfrenta España en esta materia son la insuficiente masa de investigadores, la escasa inversión privada en investigación y el importante retraso en la Sociedad de la Información.

Habló del Programa INGENIO 2010 como un importante esfuerzo del Gobierno para corregir desequilibrios regionales y dijo que, conscientes de la necesidad de coordinación con las comunidads autónomas, la próxima Conferencia de Presidentes se va a dedicar a I+D+i, con el fin de aumentar la coordinación entre el Gobierno y las comunidades autónomas y de estas entre sí.

El presidente del Gobierno se comprometió a elevar la inversión para alcanzar la media europea de "los Quince" y explicó que en 2005 ya se ha acometido un importante avance en relación con la Sociedad del Conocimiento y el impulso a las nuevas tecnologías.

"Vamos a colocar a España donde le corresponde" en I+D+i, prometió Zapatero, quien aseguró que el esfuerzo que ha hecho el Gobierno en año y medio en materia de investigación "no tiene precedentes". Anunció que en 2006, los Presupuestos Generales del Estado prevén un incremento del 30,9 por ciento, la cifra más alta que se recuerda.