Rodríguez Zapatero analizó esta mañana el primer informe redactado a partir de los datos de las fuerzas de seguridad sobre el cumplimiento de ese alto el fuego, y cuya existencia había confirmado el propio Alonso.

El contenido de ese documento era la información más preciada en los pasillos del Congreso de los Diputados al comienzo de la sesión de control al Gobierno.

Sobre él fue preguntado Alonso al llegar a la Cámara por parte de numerosos informadores, que tan sólo consiguieron arrancar al ministro un gesto con los dedos sobre las comisuras de los labios para dejar claro que no pensaba desvelar dato alguno.

Minutos después los periodistas preguntaron también al presidente del Gobierno, que pasó de largo sin responder a las preguntas. Sólo antes de entrar en el salón de plenos se giró sonriendo hacia los medios de comunicación, para expresar una intencionalidad idéntica a la de Alonso.

La existencia de ese informe, el primero de unos documentos que serán elaborados por el ministerio y enviados al presidente Gobierno de forma periódica, confirma la intención de Rodríguez Zapatero de verificar la autenticidad del alto el fuego de ETA antes de dar ningún otro paso.