Tras su llegada a la capital vallisoletana, Zapatero fue recibido por un centenar de personas que se manifestaron en favor del soterramiento del AVE y la ampliación a otras zonas de Castilla y León de la alta velocidad.

El líder del Ejecutivo apuntó que las cuentas públicas están en un momento positivo ya que cuentan con un importante superávit que puede proteger a España frente a cambios de ciclo económico.

Según explicó, el actual superávit, que cerrará 2007 próximo al 1,8%, daría para construir otras cinco infraestructuras como la que hoy se presentó.

"Se trata de una obra histórica y una obra de país. Pero es un reconocimiento a la labor desarrollada por el Gobierno anterior que ejecutó una tercera parte de la misma y siento profundo orgullo de desarrollar dos terceras parte de la misma", aseveró Zapatero.

La llegada de la alta velocidad a las ciudades es, según Zapatero, sinónimo de prosperidad y oportunidades para el desarrollo económico y la vertebración del territorio.

El presidente del Gobierno recordó que a finales del próximo año 2010, España será el país del mundo con más kilómetros de vías de alta velocidad.

"Nos situaremos no ya en primera línea, sino en el vagón de cabecera porque somos una economía de éxito que invierte en innovación y podemos conseguir ese objetivo porque contamos con algunas de las empresas más competitivas del mundo", insistió.

También se acordó en este acto de la llegada del AVE a Barcelona, si bien no se atrevió a decir una fecha concreta, puesto que esta línea ya tendría que haber estado operativa antes de fin de año.

"Pronto pondremos en servicio la línea de Barcelona, de la que podrán disfrutar plenamente los ciudadanos que, lógicamente, tienen ganas", dijo Zapatero, tras apuntar que servirá para vertebrar Cataluña con el conjunto de España.

El líder del Ejecutivo recordó a "quienes dejaron su vida trabajando en esta infraestructura", y es "justo que rindamos un homenaje a estos cuatro trabajadores".

También apuntó que la puesta en marcha del AVE no ha sido apresurada, sino que se ha producido tras las pertinentes pruebas para que todo funcionase correctamente.

ESFUERZO Y COMPLEJIDAD

Por su parte, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, dijo que "hemos dado un paso definitivo" en el objetivo histórico de vertebrar España.

Destacó que infraestructuras como la que se inaugura hoy o como la llegada, mañana, del AVE a Málaga "sitúan a España en el lugar en el que le corresponde".

"Es muy importante valorar el gran essfuerzo que se ha hecho. Es una obra de gran magnitud y complejidad, pero finalmente es hoy ya una realidad", se felicitó.

Álvarez señaló que las líneas ferroviarias son una alternativa "real" e "incontestable" frente a otros medios de transporte que, además, apuesta por la sostenibilidad.

En cuanto al precio, un billete a Valladolid costará 31,50 euros, si bien sacando el billete con antelación suficiente se pueden lograr importantes descuentos que dejarían el precio, en el mejor de los casos, en los 11 euros.

Por su parte, el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, agradeció el esfuerzo "continuado de inteligencia" de dos gobiernos de España que "han sabido abrir un camino".

La llegada de la alta velocidad a Valladolid se trata, según apuntó Herrera, de un contecimiento "trascendental" e "histórico".

Pero Herrera trasladó al presidente del Gobierno varias inquietudes. En primer lugar, admitió que existen otros puntos de la comunidad que requieren también un trazado del AVE.

300 KM POR HORA

Tras partir de la estación madrileña de Chamartín, el primer convoy de alta velocidad "voló" hasta la ciudad de Segovia en media hora. Allí, el presidente del Gobierno descubrió una placa para inaugurar la estación.

De nuevo, rumbo a Valladolid, el tren AVE alcanzó la ciudad en otra media hora, con lo que el tiempo total estimado en unir ambas capitales no superará los sesenta minutos.

En algunos de los tramos el tren sobrepasó ligeramente los 300 kilómetros por hora. Así, a partir de mañana domingo la línea ya operará para el público y contará con diez trenes AVE, cinco en cada sentido, y 16 trenes Alvia (ocho por sentido).