En una conversación informal con los periodistas, Zapatero explicó que él no ha citado a Rajoy el viernes "para convencerle de nada" y señaló que no es una cuestión de confianza entre ambos. "Yo le llamo para que las cosas salgan bien", advirtió el presidente del Gobierno, quien añadió que ni Rajoy es responsable ante él ni a la inversa. "Cada uno somos responsables ante los ciudadanos", recalcó.

Zapatero aseguró que "nunca me oiréis decir que esto (el proceso de paz) no ha salido por el PP. Ni lo he dicho ni lo diré".

Añadió que, tras la entrevista con Rajoy, no va a haber una ronda formal con el resto de partidos, al estilo de las que hubo en meses atrás, aunque podrían darse contactos.

El jefe del gobierno insistió en que su decisión de convocar a Rajoy es "política", porque es consciente de que "las posiciones están bastante claras, aunque eso no quita para que hablemos". La reunión se estaba gestando "desde hace semanas", puntualizó el presidente.

En referencia a las interpretaciones tras conocerse el "zutabe" 111 de ETA, en el que se daba a entender que al final del otoño habría novedades, en clara alusión a una posible ruptura del alto el fuego, Zapatero ironizó diciendo que no puede hablar por suposiciones. Sí indicó que es "espectacular" la cantidad de cosas falsas e inexactas que se están publicando.