Aseguró que la reforma laboral que pretende llevar adelante el Ejecutivo "convertiría los centros de trabajo en reinos de tayfas medievales con un sólo dueño y señor, que sería el empresario".

"Si las medidas laborales se imponen", agregó, "convertirán a los trabajadores en ciudadanos de segunda categoía frente a los empresarios".

Zaguirre añadió que el objetivo de la huelga es crear espacio para "una negociación real para abordar los problemas de fondo del país, que se cae a pedazos".

El líder sindical dijo que se ven forzados a movilizarse, ya que "quedarse parados supondría hacerse cómplice del gobierno, sería una irresponsabilidad que, con el tiempo, pagaríamos".

El secretario general de USO comparó el intento de "demolición" del Estatuto de los Trabajadores con un "golpe de Estado", a que supone una agresión brutal a la Constitución y a la democracia.

Zaguirre resaltó el valor de la unidad sindical de cara a la huelga general pero bajo el principio de "juntos pero no revueltos".

Agregó que "sería muy grave que UGT y CCOO quisieran eludir la manifestación en Madrid el día de la huelga. Nos tememos que esa intención sea el reflejo del problema planteado con PSV y el holding de empresas de UGT".