Fuentes sindicales aseguraron hoy que las plazas han sido cubiertas rápidamente y que algunas dependencias policiales ya conocen los nombres de los designados, como es el caso de la comisaría madrileña de Retiro, que solicitó 25 voluntarios.

Las razones esgrimidas por los policías para trasladarse a Barcelona son de tipo económico y familiar. En el primer caso, a la dieta normal que cobran los miembros de las fuerzas de seguridad cuando se desplazan (6.500 pesetas) se unela idea de que podrían percibir una gratificación especial.

Respecto a las razones familiares, algunos funcionarios se han apuntado como voluntarios para llevarse a sus familias y que vean en directo los Juegos, pese a que ellos tendrán que trabajar y no podrán coger vacaciones en los meses de verano.

Sin embargo, en otras unidades más especializadas, como los desactivadores de explosivos o las de reserva, es previsible que toda la plantilla tenga que ir obligatoriamente a Barcelona, según las mimas fuentes.

El alto número de voluntarios que se han presentado rompe las consignas dadas por los sindicatos policiales, que aconsejaron a sus afiliados que no se ofreciesen para ir a la Ciudad Condal ni a Sevilla, en protesta por la política del Ministerio del Interior.

En junio de 1992 habrá en Barcelona 17.000 agentes del CNP y de la Guardia Civil y otros 5.000 en Sevilla, ciudad sede de la Exposición Universal. En los presupuestos de 1992 figura un gasto extraordinario de 3.700 millones de psetas para cubrir el capítulo de seguridad de ambos eventos.

Aún falta por determinar dónde serán alojados los policías que se desplazarán a estas ciudades, aunque se ha hablado de residencias universitarias, colegios mayores e incluso de viviendas prefabricadas, que Interior vendería posteriormente.