La puesta en marcha de este plan se produce dos años después de que el presidente del Gobierno gallego, Manuel Fraga, hiciera varias declaraciones contra el uso de condones, durante la paada campaña electoral en Galicia.

Los "kits", pensados para la prevención del SIDA entre los drogodependientes, serán repartidos en las farmacias que colaboran con el Ejecutivo gallego al precio que cuesta la jeringuilla, según informaron hoy fuentes de la Administración.

Para este año el plan prevé también la creación de hogares de acogida para niños y adultos afectados por la enfermedad, que a menudo son abandonados en los hospitales.

Según datos del Gobierno gallego, en esta comunidad autnoma hay actualmente 5.000 afectados por el VIH, la mayoría de ellos consumidores de drogas por vía parenteral.

La Xunta destinará en 1992 a este programa de prevención y lucha contra el SIDA un presupuesto de 2.000 millones de pesetas.