Según informó la Xunta, a estos tres propietarios se les impuso una sanción grave en aplicación de la Ley de Protección de Animales Domésticos, después de la denuncia interpuesta por ciudadanos que presenciaron los maltratos.

Las tres personas denunciadas deberán pagar algo más de 3.000 euros por cada caso de maltrato. Uno de los expedientes recoge una sanción de 6.000 euros y el decomiso del perro, que fue reiteradamente maltratado por su dueño.

Según la Xunta, estas sanciones ponen de manifiesto el importante esfuerzo que realiza la Consejería de Medio Ambiente para garantizar el bienestar de los animales y concienciar a la población de la necesidad de cuidar el medio ambiente del que también forman parte los animales.