"Este es uno de los objetivos que se plantea al actual Gobierno autonómico de cara a la próxima legislatura", explicó Batán. "En la ctualidad dependen de mi departamento 45 centros sociales".

Durante el ejercicio de 1993, el Ejecutivo gallego impulsará la puesta en funcionamiento de 30 centros sociales más, en algunos casos construidos mediante acuerdos entre la Consejería de Trabajo y Servicios Sociales y los municipios beneficiarios, mientras que en otras ocasiones se harán mediante acuerdos entre Servicios Sociales y el Departamento de Cultura.

Estos nuevos centros serán gestionados directamente por los propios ayuntamients, de acuerdo con el espíritu de la recientemente aprobada Ley de Servicios Sociales de Galicia, que Javier Batán definió como "tremendamente municipalista".