El Ejecutivo gallego se reunió en Santiago con representantes de los armadores y pidió un voto de confianza para sus gestiones ante el Gobierno central, reclamando recortes o paralización total de importaciones de paises terceros como Rusia o Marruecos.

Los armadores vertieron en el puerto de Malpica (La Coruña) casi 16 toneladas de sardina, al comprobar lo bajos precios.

En versión del director general de Pesca de la Xunta, Juan Caamaño, el Gobierno autonómico confía en que la administración centraladvierta que la situación no se puede mantener y que es preciso reclamar de la CE la aplicación de las claúsulas de salvaguarda para solucionar el problema.

"El ministro y el secretario general de Pesca deben tener muy en cuenta esta cuestión, que no afecta sólo a Galicia", manifestó Caamaño.

Juan Caamaño informó a los armadores que ayer mismo elpresidente dela Xunta, Manuel Fraga, se dirigió a Pedro Solbes reclamando la paralización de importaciones de sardinas al menos durante dos meses, y que en ningún caso se permita la entrada de sardina por debajo de los precios de referencia.