No obstante, la Xunta señala quede la investigación realizada por los técnicos de la Consejería de Familia y Promoción de Empleo, Mujer y Juventud se deduce que algunas medidas eran inadecuadas desde el punto de vista pedagógico.

Los técnicos han llegado a esta conclusión tras reunirse con los padres de los menores, con las alumnas en prácticas que trabajan en "Dálmata" y con los directivos y miembros de la Asociación de Vecinos de A Seca.

La Xunta se ha comprometido a hacer un seguimiento exhaustivo del funcionamiento de la gurdería, así como un estudio psicológico de los 50 niños matrículados.

El Gobierno gallego se ha dirigido por escrito a los padres de todos los niños para conocer su opinión individualizada, ya que hasta ahora la delegación de la consejería en Pontevedra no ha recibida ninguna denuncia por parte de los padres.