Este documento, con validez hasta 1999, será presentado por el Gobierno en Bruselas antes de fin de mes, por lo que el consejero de Pesca de la Xunta, Juan Caamaño, ha solicitado al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Vicente Albero, una reunión urgente para debatir esta cuestión.

La Xunta estima que el Gobierno apenas aceptó ninguna de sus propuestas, por lo que remitió al Ejecutivo cinco hojas de alegaciones sobre aspectos que el Gobierno gallego entiende deben ser modificados. Según la Xunta, la Administración no tiene en cuenta las competencias pesqueras autónomas, no respeta la filosofía regionalizadora del IFOP y no acata los preceptos constitucionales y estatutarios.

"El Plan Sectorial de Pesca Español relega a Galicia al papel de mera ventanilla para tramitar los asuntos pesqueros de su propia comunidad, mientras que las decisiones las sigue adoptando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación", denuncia la Xunta.

Según el Gobierno gallego, el plan despecia totalmente el espíritu con el que la UE diseñó el reparto de los fondos comunitarios para pesca, donde, según la Xunta, existe una referencia clara a que deben ser regionalizados.