Fuentes próximas a estos políticos amenazados informaron a Servimedia de que la utilización de estos inhibidores era frecuente hace unos años, cuando la banda etarra se encontraba en plena ofensiva criminal contra concejales y cargos públicos.

El fin de este dispositivo electrónico, que va colocado en el salpicadero del vehículo de los amenazados, es neutralizar la frecuencia que eventualmente podría emitir un mando a distancia con el que los terroristas tratasen de activar una bomba a distancia.

Al parecer, las dudas sobre la evolución del alto el fuego anunciado en marzo por ETA es lo que ha llevado a los servicios de protección de algunos amenazados a volver a recurrir a los inhibidores.

La utilización nuevamente de este sistema utilizado para neutralizar coches-bomba se ha producido, en concreto, en el caso de parlamentarios vascos pertenecientes a formaciones no nacionalistas.

Al mismo tiempo, fuentes de la Policía Local de San Sebastián consultadas por Servimedia aseguraron que agentes de este cuerpo asignados a labores de escolta de políticos han sido advertidos de que deben incrementar las medidas de seguridad.

En este sentido, las fuentes consultadas aseguraron que la Policía donostiarra realiza en la actualidad labores de protección de los concejales del PSE en el Ayuntamiento de la capital guipuzcoana, que es a los que tiene asignado dar seguridad.