Hasta ahora la compañía facturaba a sus clientes el primer minuto de la llamada completo, independientemente de si agotaba ese tiempo o no. Sin embargo, los clientes que opten por esta tarifa sólo pagarán los segundos que estén hablando, aunque la llamada dure menos de un minuto.

A los usuarios que no opten por esta tarifa, Vodafone seguirá cobrando el primer minuto completo y luego por bloques de 30 segundos, a pesar de que el Gobierno ha aprobado ya un anteproyecto de ley para prohibir estas prácticas y obligar a las empresas a cobrar por el servicio realmente prestado.

Las otras tres opciones entre las que podrán elegir los clientes de contrato y de tarjeta de la compañía incluyen la posibilidad de pagar sólo el primer minuto de la llamada aunque ésta dure una hora; reducir los costes de los mensajes de texto a la mitad, o la opción de recibir 10 euros de saldo gratis si se consumen más de 20 al mes.

Los costes básicos de las llamadas con esta tarifa serán de 18 céntimos de euro por minuto para contratos y de 28 céntimos para tarjetas. A esta tarifa se aplicarán los posibles descuentos según la opción que elija el usuario entre las cuatro que ofrece la compañía.

El cliente que acceda a las tarifas "Vitamina", que implica un consumo mínimo de 9 euros al mes, podrá cambiar su opción hasta seis veces al año.