En su escrito, que será estudiado mañana por el pleno del CGPJ, Gómez de Liaño expresa que ante la "inquietud y sobresalto" que han producido las informaciones sobre dichas excarcelaciones, el Consejo del Poder Judicial "debe iniciar actividades inspectoras con el fin de recabar la oportuna información oficial".

El vocal precisa que, según puede leerse en la prensa, "algunos miembros de ETA, procesado en causas que se tramitan en la Audiencia Nacional, pueden ser puestos en libertad al agotarse el tiempo de duración máximo de la prisión preventiva", que es de 4 años.

Agrega que "esta preocupación se ha convertido en hecho acreditado" en el caso de tres miembros del 'comando Matalaz' de ETA, cuya causa es seguida por la sección segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, quienes "fueron liberados antes del plenario, sin que desde entonces se haya vuelto a tener noticias de ellos al hui de la acción de la justicia".

Por ello, estima que el pleno del CGPJ debe ordenar al Servicio de Inspección dependiente de ese organismo o al presidente de la Audiencia Nacional, Clemente Auger, que recaben "una información pormenorizada sobre la situación de miembros de bandas organizadas y armadas procesados o inculpados en causas penales seguidas en los juzgados y tribunales de ese órgano judicial".

Señala que "aunque pueda ser supérfluo, no está de más expresar que esas actividades dirigidasa preguntar qué está pasando se pongan en marcha con el debido respeto a la libertad e independencia jurisdiccional".

En relación a este asunto, el Grupo Popular anunció que pedirá que el presidente del CGPJ, Pascual Sala, dé explicaciones al Congreso de los Diputados sobre la fuga de dichos etarras que aprovecharon su retraso en ser juzgados para irse de España.

Los tres etarras fugados, Asier Quintana, Juan María San Pedro Blanco y Raúl Angel Fuertes, fueron puestos en libertad en junio del pasdo año por la sección segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional al concluir el tiempo establecido de permanencia en prisión preventiva.

Los tres miembros de ETA se encuentran en paradero desconocido desde que el pasado 17 de julio dejaron de comparecer a diario en la comisaría o juzgado de guardia de su lugar de residencia, tal como les impuso la Audiencia Nacional.