Salud y medio ambiente

Vivir cerca de un aeropuerto eleva el riesgo de diabetes, hipertensión y demencia

- Por la exposición a las partículas ultrafinas de los aviones, según un estudio de Transport & Environment

- Cerca de ocho millones de españoles residen como mucho a 20 kilómetros de los principales aeropuertos

MADRID
SERVIMEDIA

La exposición a las partículas ultrafinas que emiten los aviones está asociada a un incremento del riesgo de diabetes, hipertensión arterial y demencia, lo que puede afectar las personas que viven cerca de los aeropuertos.

Así se desprende de un nuevo estudio de la federación europea Transport & Environment (T&E), a la que pertenecen las organizaciones españolas Ecologistas en Acción, eco-union y Asociación para la Promoción del Transporte Público (PTP).

Las emisiones de los aviones impactan en la calidad del aire. Cuando queman combustible, se liberan partículas de diferentes tamaños, incluidas partículas ultrafinas de menos de 100 nanómetros de diámetro, aproximadamente 1.000 veces más pequeñas que un cabello humano.

El estudio ofrece una primera estimación de los efectos de esas partículas diminutas en la salud al analizar datos de la zona del aeropuerto de Schiphol, de Ámsterdam (Países Bajos), y extrapolarlos a los principales aeródromos europeos, entre ellos cuatro en España: Madrid-Barajas, El Prat de Barcelona, Palma de Mallorca y la Costa del Sol de Málaga.

Así, los investigadores indican que alrededor de 330.00 casos de diabetes, 280.000 de hipertensión arterial y 18.000 de demencia pueden estar relacionados con las emisiones de partículas ultrafinas entre los 51,5 millones de personas que viven en un radio de 20 kilómetros de los 32 aeropuertos más transitados de Europa.

MEDIDAS

Según Ecologistas en Acción, alrededor de ocho millones de personas viven como mucho a 20 kilómetros de alguno de los cuatro aeropuertos mencionados (un 16% de la población del país), por lo que están expuestas a las partículas ultrafinas de los aviones.

El estudio señala que un combustible ‘hidrotratado’ para la aviación con muy bajo contenido de azufre y aromáticos puede reducir hasta un 70% el número de emisiones de partículas ultrafinas, lo que tendría su reflejo en la salud humana.

Otras medidas para reducir las partículas ultrafinas y mejorar la calidad del aire son la reducción del tráfico aéreo y del crecimiento exponencial de la aviación, así como el uso de tecnologías más limpias, como los combustibles de aviación sostenibles (SAF, por sus siglas en inglés) y los aviones de emisiones cero.

“¿Vivir cerca de un aeropuerto puede hacerte enfermar? Lamentablemente sí. Los aviones liberan partículas diminutas que pueden estar relacionadas con enfermedades pulmonares y cardiovasculares. Los políticos han ignorado esta crisis sanitaria oculta, priorizando el crecimiento del sector de la aviación y los viajes de negocios sobre la salud de su propia población, a menudo la más empobrecida y vulnerable”, según Pablo Muñoz, de Ecologistas en Acción.

(SERVIMEDIA)
27 Jun 2024
MGR/gja