Así consta en el "Estudio de mercado de la vivienda nueva en capitales de provincia", que cada semestre elabora la Sociedad de Tasación S.A. con datos de 64.500 casas repartidas por toda la geografía española.

La subida del primer semestre del 2002 es ligeramente inferior a la del mismo periodo del 2001, que fue del 5,5%, lo que los tasadores consideran como un "cambio de tendencia" a la baja y una "desaceleración" en la evolución alcista de los precios de la vivienda nueva en los ltimos años.

Con esta subida del 4,4% en el primer semestre del 2002, la vivienda ha incrementado un 10,1% su precio en el último año, respecto a junio de 2001.

Sin embargo, en once capitales de provincia, el precio medio unitario de la vivienda todavía no supera los 900 euros por metro cuadrado, lo que supone que la adquisición de una vivienda de tipo medio no supera los 90.000 euros (unos 15 millones de pesetas).

Según el informe, los pisos son más caros en Barcelona (2.390 euros el metro uadrado), San Sebastián (2.380) y Madrid (2.164), con incrementos respectivos del 4,7%, 5,3% y 4,8% en el último semestre.

Por contra, la ciudad donde resulta más barato adquirir una vivienda es Badajoz (700 euros por metro cuadrado), seguida de Huesca, Cáceres, Castellón de la Plana, Teruel y Lugo, con precios inferiores a los 820 euros el metro.

Con ello, el esfuerzo que tiene que hacer una familia para adquirir una vivienda de tipo medio es el triple en Barcelona, Madrid o San Sebastián que encualquier capital extremeña, en Teruel o en Lugo.

NUEVA TENDENCIA

Los tasadores aseguran que el "boom" de subida de precios de la vivienda puede haberse frenado y auguran un cambio de tendencia basado en un ligero repunte de los tipos de interés hipotecarios y un gran ritmo de la construcción de viviendas, que sólo ha bajado un 2,7% respecto al año anterior.

Además, apuntan la disminución de la renta disponible de las familias españolas, tal y como lo señala el último informe del Banco de Españ.

Como conclusión de todo ello, los tasadores afirman que "si la oferta no disminuye sensiblemente" el encarecimiento de la vivienda sera "inferior al de periodos anteriores".

Finalmente, apuntan que el comportamiento del precio de la vivienda nueva será muy desigual en función de su ubicación. Así, será muy difícil que se abarate en el centro de las ciudades, si bien se desacelerará en las áreas de expansión de los núcleos urbanos.