La Renta de Emancipación, medida estrella de la ministra Carmen Chacón para impulsar el mercado del alquiler, supone una ayuda de 210 euros al mes para el alquiler de jóvenes, más un préstamo de 600 euros para la fianza y de 120 para el coste financiero del aval.

Entre las condiciones para recibir las ayudas que contempla la Renta Básica de Emancipación se encuentra la de que tanto la domiciliación bancaria para la recepción de las ayudas como la del pago periódico del alquiler habrán de efectuarse en una entidad financiera colaboradora.

Podrán adquirir la condición de entidad colaboradora para la gestión, seguimiento y control de esta prestación los bancos y cajas que lo soliciten, acepten las condiciones de Vivienda y firmen un convenio de colaboración.

Entre las cláusulas del convenio que firmará el Ministerio con las entidades financieras figura que éstas han de suministrar información semanal de todas y cada una de las resoluciones que se les presenten.

Además, han de ofrecer información dos veces al mes, vía fichero por canales telemáticos, de las transferencias bancarias efectuadas y devueltas correspondientes al pago de las cuotas de alquiler por parte de los beneficiarios, así como de los avales formalizados.

Estas transmisiones de información podrán efectuarse bien directamente por cada entidad financiera colaboradora o por una que represente a varias de estas entidades.

El Ministerio de Vivienda dará la orden de transferencia bancaria de los 210 euros a través del Banco de España para su abono en la cuenta personal establecida.