Caldera, quien insistió en que la posición del Grupo Socialista al respecto quedará definida formalmente en cuanto la iniciativa esté plasmada en los Presupuestos de 1996, aseguró que "todo cabe, siempre que las soluciones sean redistributivas".

Añadió que en una materia "tan cambiante" como es la aplicación de desgravaciones en el Impuesto de la Renta, "parece que están bien fundamentadas" las propuestas que en estos momentos maneja la Secretaría de Estado de Vivienda.

"A un socialista", puntulizó, "no le repugna en absoluto reorientar unas declaraciones (de la renta) dándole mayor carácter redistributivo, que es lo que persigue la propuesta de la Secretaría de Estado. Esa política es correcta y se adapta perfectamente al mensaje que un partido como el socialista debe lanzar y aplicar en la sociedad".

Por otra parte, el secretario general del Grupo Socialista, que hizo estas reflexiones en rueda de prensa, reiteró que en los dos últimos años el PSOE ha sufrido un problema "bastante agudo" e comunicación.

A su juicio, el Parlamento nunca había trabajado con tanta intensidad como en los dos últimos años "y nunca el Grupo Parlamentario Socialista había tenido tanta iniciativa como en estos dos últimos años", lo que, a su modo de ver, no ha sido bien percibido por el conjunto de la ciudadanía.

Caldera dijo que el grupo continuará ejerciendo esa iniciativa, basada fundamentalmente en el desarrollo del programa electoral con el que el PSOE concurrió a las últimas eleciones.

"Seguirmos estudiando cuáles han sido los problemas que han hecho que una parte importante del electorado nos haya abandonado en los últimos comicios, para intentar dar satisfacción a sus necesidades, todo ello dentro del marco global del programa del PSOE de 1993", concluyó.