Conchita Martín, viuda del teniente coronel Pedro Antonio Blanco, primer asesinado por ETA tras la tregua de 1998, aseguró a Servimedia que "no cabe esperar otra cosa" del PNV, al tiempo que añadió que este partido es "un grupo de machistas anacrónicos".

A su vez, Ana María Vidal Abarca, viuda del militar Jesús Velasco Zuazola, asesinado en 1980, dijo que la formación que preside Ínigo Urkullu debe hacer "mucho examen de conciencia".

Ambas viudas valoraban la afirmación que, según publica este lunes el diario "El País", habría realizado un miembro de la Ejecutiva del PNV tras la marcha del sábado en Bilbao, en la que intervino la viuda de Eduardo Puelles. Este dirigente peneuvista habría dicho que la esposa de Puelles "lo mezcló todo", lo que lleva a concluir a este responsable nacionalista que "es mejor que las viudas no hablen".

A este respecto, Conchita Martín añadió que el PNV se ha destacado por sus "actos de cobardía" en el pasado respecto a ETA. Asimismo, sostuvo que la intervención de la esposa de Puelles "es fundamental no sólo para salir adelante, sino para condicionar el ambiente social".

A su vez, Ana María Vidal Abarca señaló que "les diría a los del PNV que respeten a las viudas", al tiempo que añadió que la afirmación de este dirigente del PNV evidencia cuál ha sido el "comportamiento" de los peneuvistas respecto al terrorismo durante muchos años.