Una gran cantidad de ciudadanos de esa comunidad han aprovechado el Día Nacional de Cataluña, que se celebra hoy, para desplazarse a Sevilla y visitar la Exposición Universal. "Si habitualmente entraban en el pabellón de Cataluña 5.000 personas, durante esta semana se ha triplicado la asistencia", informó a Servimedia el portavoz de este pabellón..

"Estamos con una media de 15.000 personas, que hoy puede ser ampliamente superada,con lo cual, extrapolando estos datos, se puede uno hacer una idea de la gente que está aquí procedente de Cataluña", agregó. La situación en las calles de la capital andaluza es similar.

Además de la avalancha registrada con motivo de la "Diada", los responsables de la muestra esperan que esta situación se prolongue durante todo el mes de septiembre, debido al "puente" de la Merced, patrona de Barcelona, que se celebra el próximo día 24.

Otros factores que están haciendo aumentar de forma espectcular el número de visitantes catalanes durante estas fechas son, según las mismas fuentes, la celebración de muchas fiestas mayores en diferentes pueblos de Cataluña y los Juegos Olímpicos.

"Mucha gente, al estar en época de Olimpiadas en Cataluña, se ha quedado allí y en vez de aprovechar los meses de julio y agosto, han aprovechado ahora estos 'puentes' de septiembre", indicaron.

La avalancha de visitantes no sólo se nota en el pabellón de Cataluña, sino que están colapsando prácticamente todoel recinto de la Expo-92. Según fuentes de la organización, "se oye hablar la lengua catalana por todas las instalaciones de la muestra".

La situación es similar a la que se registró el pasado mayo, cuando decenas de miles de madrileños se desplazaron a Sevilla aprovechando la fiesta regional del 2 de Mayo, lo que provocó un record de asistencia.

En cuanto a las características de este turismo, fuentes de la organización indicaron que es eminentemente familiar. Pese a la gran cantidad de gente qu abarrota el recinto, no se ha registrado ningún incidente de importancia. Incluso a pesar de que el número de visitantes casi dobla las cifras habituales, las asistencias sanitarias están teniendo que trabajar menos.

Para poder absorber la demanda sin que se produzcan grandes aglomeraciones, el personal de servicios se ha concentrado en las zonas de mayor afluencia, para controlar a los visitantes.