Sin embargo, se mostró convencido de que, cuanto más recurran a la violencia má clara será su derrota, porque "cada vez que los violentos atacan, ya sea el domicilio de un militante socialista o de un concejal del PP, los votos constitucionalistas aumentan".

"La causa que dicen defender los violentos, con esos métodos se denigra, se deslegitima. O los nacionalistas paran la violencia callejera y la otra, o su propia causa morirá democráticamente en Euskadi", aseveró.

En esta misma linea, advirtió a los convocantes de la manifestación de Bilbao del 15 de enero que la decisió de EH de sumarse a ella con sus propios lemas puede convertir un acto, "que en parte pretendía pedir a ETA que deje de matar, en lo contrario. Esta es la reflexión que deben hacerse PNV, EA e IU, al tener como compañeros de viaje a quienes siguen amparando y justificando la violencia".