En declaraciones a Servimedia, Bodas dijo que, "desgraciadamente, nos encontramos de nuevo ante algo difícilmente inteligible por parte de los ciudadanos", donde "la actuación judicial, desde el punto de vista técnico, no se puede reprochar, por cuanto parece ser que no ha sido posible encontrar pruebas efectivas de la culpbilidad de la persona a la que se había imputado".

No obstante, matizó que "lo que es realmente grave es que esas pruebas existían o deberían haber existido, y así se deduce de las dos resoluciones, tanto la del País Vasco como la del Tribunal Supremo", si los responsables de la custodia de la joven brasileña hubieran testificado lo que realmente sabían.

"Nos parece que es absolutamente exigible para la calidad democrática y la garantía del Estado de derecho el que la policía actúe de la manera e que tiene que hacerlo, cumpliendo con sus obligaciones constitucionales, y por esa razón la actuación de estos policías parece poco compatible con una policía democrática", subrayó.