Martínez Blanco y Mota, que pertenecen a la "vieja guardia" de Alianza Popular, se sienten desplazados por los "recién legados" del extinto Partido Demócrata Popular (PDP), al que perteneció el alcalde de Madrid, José María Alvarez del Manzano.

El alcalde negó estas acusaciones y aseguró que a los ediles contestatarios no les ha quitado competencias en su actuación, porque él trata "exactamente igual al primero que al último de los concejales que están conmigo en la lista del Ayuntamiento, otra cosa es que tengan distintas funciones".

Martínez Blanco y Mota aseguraron que están de acuerdo con el candidato que ha romovido Aznar para dirigir el PP de Madrid, Pío García Escudero, al que calificaron de "buen chaval", pero añadieron que "no estamos de acuerdo con muchas de las personas que le acompañan".

Recordaron que, a pesar de que el PP tiene estatutos "que hablan de incompatibilidades, vemos como Alberto Ruiz-Gallardón, senador y diputado regional conservador, el señor Rato y algunas personas más están copando 5 ó 6 cargos". Añadió que, aunque esas personas son competentes, "no podrán cumplir con el cometido ue tienen".

Los dos concejales extendieron sus quejas a otras personas "recién llegadas al partido, que están copando la cúpula del PP pero abandonando a las bases de Alianza Popular (AP), "lo que ustedes (dirigiéndose a los periodistas) denominan vieja guardia".

Según este concejal, los nuevos afiliados, provenientes del PDP, Unión Liberal y CDS, aunque sólo representan un 4 ó un 5 por ciento de la afiliación, acceden a numerosos puestos de la dirección regional y nacional de la formación conseradora.

Si los concejales cumpliesen su amenaza, y se pasaran al Grupo Mixto del Ayuntamiento de Madrid, el PP podría perder la mayoría absoluta de que dispone ahora en el consistoria madrileño, al contar con 30 de los 57 puestos de edil.

A este respecto, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, José María de la Riva, declaró, tras conocer la situación creada en las filas populares, que se trata de algo "que nos ha pillado absolutamente de sorpresa", pero que no han contemplado la posiilidad de plantear una moción de censura, "aunque los grupos de oposición pasaran a tener mayoría".