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VIDAL-QUADRAS RECLAMA MAYOR AMBICIÓN Y FIRMEZA AL PP PARA CONSEGUIR MAYORÍA ABSOLUTA Y NO DEPENDER DE LOS NACIONALISTAS

- Admite que la nueva estrategia de su partido le puede llevar al Gobierno, pero "eso no solucionaría nada"

MADRID
SERVIMEDIA

El europarlamentario del PP Alejo Vidal-Quadras reconoció hoy que la estrategia que adoptó su partido tras las elecciones de 2008, que ha criticado en diversas ocasiones por su falta de ambición y firmeza, "puede hacer que el PP gane las próximas generales", pero objetó que eso "no es lo que el país necesita"

Vidal-Quadras no se mostró especialmente entusiasmado con el vuelco en intención de voto que refleja el último Barómetro del CIS y que ayer llevó al presidente popular, Mariano Rajoy, a asegurar que "la ola de cambio ya está instalada en España".

El ex presidente del PP catalán constató, en declaraciones a Servimedia, que "hay un reciente cambio" en la calle, porque existe el "clima de que el Gobierno no está enfocando los problemas de manera correcta" y es una "fuente permanente de tensión interna", todo lo cual ha empezado a reflejarse en las encuestas.

Ante esta situación, Vidal-Quadras define la estrategia del PP desde el Congreso de Valencia como "esperar a la caída del PSOE", debido a sus "errores notorios". A él le parece "una estrategia, digamos, prudente: no remover demasiado las aguas y esperar a que la incompetencia y la irresponsabilidad manifiestas de tu adversario conduzca el poder a tus manos".

PROBLEMA DE FONDO

No obstante, advirtió: "Si dentro de dos años tenemos a un PP que sustituyera al PSOE para seguir dependiendo de los nacionalistas en este camino de la disgregación nacional, tampoco habríamos ganado mucho".

A su juicio, "hay un problema de fondo del que no se habla, tampoco el PP", y es que "todo el sistema político que pusimos en marcha en el 78 está en crisis", pues lo ha "dinamitado" Zapatero.

Para Vidal-Quadras, "lo único que nos sacaría del hoyo" es "una reacción masiva de la sociedad española que le diera al PP una mayoría absoluta y arrolladora" y "condujera a un nuevo PSOE" sin Zapatero, que pactara con el PP para reformar todo el sistema". "La reproducción de la situación del 96 no solucionaría nada", sentenció.

Aunque el político catalán asegura seguir "identificado" con su partido, le pide "una postura de mucha mayor ambición y firmeza", y niega rotundamente que haya que suavizarla para resultar simpático al electorado, como parece haber entendido la dirección del PP.

"No hay necesidad de ser antipático ni desagradable. Se pueden decir las cosas claras con actitudes y lenguaje que la gente encuentre atractivos", indicó.

(SERVIMEDIA)
04 Ago 2009
CAA