Con el asesinato ayer de una mujer en Madrid a manos de su ex novio, movido supuestamente por los celos, la cifra de fallecidas por malos tratos durante el año 2000 es de 43. "Estamos ante un genocidio machista al que no conseguimos poner coto, con cifras superioresa las del año pasado", afirmó Pérez del Campo.

A su juicio, el Gobierno debería abrir una mesa de debate con las organizaciones que trabajan en el ámbito de la violencia doméstica, con el fin de consensuar nuevas medidas que frenen la escalada de víctimas mortales.

"Los medios de comunicación nos tienen que servir para dejar claro que, por ejemplo como en el caso de la fallecida de Madrid, los celos no se pueden confundir con el control posesivo", señaló Pérez del Campo.