Según Abdul Rahman, el motivo de este elevado índice de contratación es que los responsables de estas empresas e instituciones consideran a las personas con discapacidad "más trabajadoras, eficientes y de confianza."

"Empresas manufactureras y cadenas de hoteles se disputan ahora a los candidatos con discapacidad para puestos administrativos y de atención telefónica, entre otros, pero también está ocupando cada vez más puestos docentes y en profesiones liberales", añadió el viceministro de Trabajo.

Según datos del Ministerio de Trabajo malayo, de los 8.699 demandantes de empleo con discapacidad inscritos en las oficinas de empleo del país, 6.691 personas han encontrado trabajo recientemente. Por ello, Abdul Rahman animó a los discapacitados en edad de trabajar que están en paro, en torno a 120.000 según sus datos, a que se inscriban en las oficinas de empleo para que les ayuden a buscar trabajo.