Minutos antes, el Pontífice recordó con agrado en su alocución desde a Giralda el baile que "Los Seises" le habían dedicado en su primera visita a Sevilla, en 1982.

Esta fue la nota de color a una ceremonia a la que asistieron exclusivamente cardenales, obispos y participantes oficiales al XLV Congreso Eucarístico Internacional.

Procedentes de la época mozárabe, "Los Seises" interpretaron danzas sagradas dedicadas al Santísimo Sacramento desde el año 1608.

Hoy, ataviados con sus trajes de pajecillos, con sus lanzas, espadas, sonajas y castañuelas, los diez dazantes interpretaron sin titubear el programa dedicado a "María, Estrella de la Evangelilzación", interpretando el programa "Santas hijas de Sion", con motivo del acto de adoración para el clero y religiosos, que se desarrolló en medio de una profunda solemnidad.

El organista de la catedral, el padre aragonés José Enrique Ayarra, interpretó el aleluya de Haendel como despedida oficial a Su Santidad.

En la actualidad, "Los Seises" mantienen la costumbre de bailar tres veces al año delante del Santsimo: en el Corpus y en el Triduo de Carnaval, vestidos de rojo, y en la festividad de la Inmaculada, vestidos de azul.