La facturación del sector de máquinas expendedoras alcanzará cerca de 2.300 millones de euros en el presente ejercicio, frente a los 2.350 millones de 2008.

Los segmentos de bebidas calientes y, en menor medida, bebidas frías y tabaco serán los que registren tasas negativas. En cambio, las ventas de alimentos sólidos contabilizarán un moderado aumento debido a la mayor utilización de este tipo de máquinas.

DBK señala que en la segunda mitad de 2008 ya comenzó a observar una "moderación de la demanda", derivada de la caída registrada en las tasas de crecimiento del consumo privado.

En 2008 había en España cerca de 542.000 máquinas expendedoras en explotación, lo que supuso un crecimiento del 4% con respecto al año anterior. El 51% de estas máquinas correspondían al segmento de "vending" público y el 49% al cautivo (es decir, las situadas dentro de locales privados).

Para 2010, DBK prevé que la situación se mantenga "prácticamente estancada" en comparación con el actual ejercicio.