Esta mejora de las ventas se ha debido, a juicio de Faconauto, a la animación que se ha registrado en el mercado en la segunda quincena del mes, a medida que ha ido calando en los usuarios la publicidad de las marcas acompañando la reducción del impuesto de matriculación aprobada por el Gobierno.

Los responsables de Faconauto confían en que el aumento de las matriculaciones de coches registrado en enero (del 7,1%) tendrá continuidad a l largo del año, con lo que prevén que a finales de 1996 las ventas totales se aproximarán a unos 920.000 turismos.

Faconauto indicó que en enero han seguido creciendo las ventas a alquiladores, que han alcanzado las 6.000 unidades, y cree que su cuota de participación en el mecado total crecerá "significativamente" en los próximos meses, para consolidarse en un 18% de las ventas totales a finales de año (165.000 coches).

En cuanto a las matriculaciones de vehículos industriales, Faconauto estima ue en enero se han situado en los niveles del mismo mes de 1995 (10.828 unidades), con una ligera recuperación de los derivados de turismo, un mantenimiento de las ventas de furgones y camiones y una ligera caída en el ritmo de crecimiento de las ventas de vehículos pesados. En el caso de los todo-terrenos, la patronal cree que en enero se han superado ligeramente las 2.185 unidades de enero del año pasado.

Los responsables de Faconauto valoran positivamente la reducción de 5 puntos en el impuesto de atriculación, pero destacan que "tanto el consumo de coches como el consumo privado en general siguen sin despegar", lo que está repercutiendo negativamente en la rentabilidad de los concesionarios de vehículos.

Según Faconauto, "la ligera recuperación de las ventas en enero no permite, de momento, superar el deterioro del mercado interior, a pesar de las fuertes campañas y descuentos promocionales y de los esfuerzos comerciales que se han realizado acompañando la medida del Gobierno".

No obstant, los concesionarios confían en que el consumo se recuperará de forma progresiva en el segundo semestre del año, una vez pasadas las elecciones y formado el nuevo Gobierno. Esto, a su juicio, repercutirá positivamente en las empresas del sector si, además, va acompañado de una reactivación del consumo y la mejora de la confianza del consumidor, una inflación en el entorno del 3%, un descenso moderado de los tipos de interés y un aumento del empleo.