En declaraciones a Servimedia, Maciñeiras indicó que las agencias esperan que "la buena climatología prevista y el efecto psicológico positivo de la reunión del G-20 y la bajada de tipos animen algo el mercado en estos últimos días y se produzca un estirón de última hora".

De esta manera, podrían compensar la caída de entre un 15% y un 20% de la venta de viajes de larga distancia a destinos como el Caribe para toda la semana.

A este aumento de las ventas de última hora, contribuirá también, según Maciñeiras, que los hoteles de mayor categoría están lanzando grandes ofertas, "que pueden animar a mucha gente".

Las agencias prevén también que funcione bien el turismo de cercanía, los viajes a destinos de interior y a casas rurales y los viajes a las islas Canarias y Baleares.

IGUALAR VENTAS

Por su parte, el presidente de la Federación Española de Asociaciones de Agencias de Viajes (Feaav), Rafael Gallego, estimó que el sector igualará en Semana Santa las ventas del año anterior.

Según dijo Gallego a Servimedia, el turismo"es un sector camaleónico que se adapta a las circunstancias del mercado" y la sociedad "independientemente de la situación económica, porque ve los viajes como un producto de primera necesidad".

En cuanto al esfuerzo de adaptación realizado por las agencias, explicó que se adelantaron las ofertas para animar el mercado y señaló que con descuentos y promociones de 2x1 se consiguió ese objetivo.

Asimismo, indicó que el hecho de que el invierno haya sido duro ha beneficiado al sector en dos aspectos. Por una parte, eso ha permitido mantener la oferta de esquí durante estas vacaciones y, por otro, ha incrementado las ganas de quienes se decantan por destinos de playa.

También ha sido importante que la Semana Santa se celebre este año en abril y no en marzo como en 2008, y para el turismo "cuanto más tarde mejor".

Con todo ello, Gallego afirma que el sector "afronta estas vacaciones con moderado optimismo" y que espera unos resultados similares a 2008 ya que las tarifas se han mantenido.