Frente la "creencia generalizada" de que la compra de un vehículo diésel representa una opción de ahorro con respecto aa uno de gasolina por el menor consumo de combustible, el estudio de Faconauto refleja que, por debajo de los 30.000 kilómetros anuales, no resulta rentable comprarse un diésel, ya que el ahorro de carburante no compensa los gastos de una mecánica más sofisticada.

Según el informe, el parque de vehículos diésel localizado al cierre de 2005 ascendía a 9,36 millones de unidades, de las cuales 8,23 millones correspondían a turismos y 1,13 millones a todoterrenos.

Durante el pasado año, las matriculaciones de turismos con motor diésel superaron los 1,1 millones, lo que quiere decir que dos de cada tres turismos matriculados en 2005 (69,1%) estaban equipados con este tipo de motor. En el caso de los todoterreno, lo diésel alcanzaron el 86,7%.

Por otro lado, el estudio de Faconauto muestra que las ventajas que han conducido al predominio del parque de vehículos con motor diesel se reducen básicamente a una sola, el menor consumo de combustible; mientras que los vehículos de gasolina, aunque consumen más, son más amigables con el medio ambiente y precisan de un menor mantenimiento, así como de un menor número de piezas de recambio y más baratas.