De la Vega frunció el ceño cuando, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, se le preguntó sobre el cruce de declaraciones que el ministro de Industria y el presidente del Congreso han mantenido en las últimas horas a cuenta del modo de vestir de Sebastián en el debate parlamentario del miércoles sobre la crisis económica.

Cuando Bono vio que el ministro se sentaba en el banco azul con la camisa abierta y sin corbata, le envió una a través de un ujier. Sin embargo, Sebastián no se la puso y ahora piensa regalar un termómetro al presidente del Congreso para que regule la temperatura del Hemiciclo.

De la Vega se situó al margen de la polémica y afirmó que "más allá de la anécdota, hay unas recomendaciones y unas medidas que el ministro Sebastián ha puesto en marcha y que el Gobierno secunda, porque sirven para mejorar el ahorro energético".

Por eso, la vicepresidente prefirió definir lo ocurrido como una "anécdota" y trató de sacar una lectura positiva, confiando en que contribuya "a mejorar el debate sobre la concienciación" de que es necesario ahorrar energía.

Entre las medidas que Sebastián ha propuesto con ese fin está la de subir la temperatura del aire acondicionado de las empresas hasta al menos los 24 grados centígrados y permitir que los trabajadores acudan en manga corta y sin corbata a sus centros de empleo.