Según un convenio suscrito la pasada primavera por la Gerencia Municipal de Urbanismo y el IVIMA, este organismo se hacía cargo del proyecto de reforma de las viviendas, así como de la construcción de otras en la misma barriada, ya que en la actualidad las casas presntan numerosas deficiencias en su estructura.

Por su parte, la Gerencia de Urbanismo se comprometía a dar su visto bueno a la modificación del Plan General de Ordenación Urbana, ya que éste impide el derribo de los edificios existentes, medida que incluida en el plan de actuación en la barriada.

No obstante, a pesar de las numerosas reuniones que mantuvieron los representantes vecinales con el gerente del IVIMA, Miguel Angel Pascual, el proyecto de remodelación todavía no ha sido iniciado, según eclaró a Servimedia el presidente de la Asociación de Vecinos de la UVA de Hortaleza, Julián Cuesta.

"Desde junio del pasado año hasta hoy no se ha hecho nada. Al principio nos dijeron que iban a ver la parte económica, porque el año pasado no tenían presupuesto para ello, pero este año me aseguraron que no había ningún problema porque sí disponían del dinero", explicó Cuesta.

La UVA de Hortaleza está formada por más de un millar de viviendas repartidas en 50 bloques. Las casas, que fueron constridas de forma provisional en 1968 para paliar los problemas de alojamiento provocados por la fuerte inmigración de la década de los sesenta, tienen unas dimesiones que no superan los 50 metros cuadrados y en la actualidad presentan graves deficiencias en su estructura.

Cuesta indicó que el proyecto de actuación en la UVA contempla la construcción de un nuevo bloque de unas 100 casas en un solar de la barriada situado en la calle Alfacar y en unos terrenos que ocupan un colegio y una guardería en desus.

A él se trasladarían voluntariamente un centenar de familias, de forma que, a medida que los antiguos edificios queden vacíos, el IVIMA procederá a demolerlos y construir en su lugar nuevos inmuebles.

"Pascual me dijo que en cuanto tuviesen elaborados los planos del nuevo edificio sacarían a concurso su construcción, pero mi sorpresa fue que cuando tuve otra reunión después con técnicos del IVIMA me dijeron que eso no podía ser", explicó.

A su juicio, las promesas realizadas por el gerentedel IVIMA no son más que "una forma de dejarnos contentos para que no hagamos nada, un engaño para darnos largas".

El presidente de la asociación de vecinos señaló que, ante este retraso, que probablemente imposibilitará que las obras de reforma comiencen antes del verano, los residentes de la UVA estudian realizar medidas de presión.

"El proyecto se va retrasando y vamos a tener que llegar a una situación de manifestaciones y cortes de calles, lo que nunca quiso esta asociación, pero no nos va aquedar más remedio", concluyó Cuesta.