"Esta decisión", según señaló hoy a Servimedia un portavoz del colectivo vecinal, "es la primera respuesta a la falta de atención de las autoridades ante la inseguriad ciudadana que sufre la zona desde hace años".

Los vecinos afirman que el Gobierno Civil de la provincia incumplió la promesa de colocar a dos patrullas en el barrio, donde hay varios colegios, y "en una zona donde la estampa de jóvenes pinchándose es algo habitual", explicaron.

El gobernador civil en funciones, Máximo Vázquez, advirtió anoche que "al menor incidente protagonizado por los vecinos, la justicia actuará contra ellos".

La "patrulla ciudadana" accedió a dejar los garrotes que ss componentes portaban antes de iniciar la ronda de vigilancia, por lo que los vecinos patrullaron las calles desarmados.

Máximo Vázquez excusó su amenaza a los vecinos señalando que la solución al problema deberá encontrarse mediante una actuación conjunta de las diferentes administraciones.

No obstante, el gobernador no explicó por qué incumplió la promesa de enviar las patrullas policiales al barrio conflictivo y tampoco dijo nada sobre la impunidad en que traficantes importantes, "camellos" d poca monta y heroinómanos de toda clase se desenvuelven por esas calles del centro de esta capital.