"Los libros, casi todos primeras ediciones francesas con anotaciones del escritor, se rescataron de la biblioteca de José María Quiroga, yerno y secretario de Unamuno, en mayo de 1989, e inmediatamente fueron catalogados, recuperados y archivados en la biblioteca de la Casa Museo y puestos disposición de los investigadores", subrayó la directora.

Este pasado lunes, la nieta del escritor, Concha de Unamuno, denunció, en una entrevista concedida a Servimedia, el pésimo estado que presentaban alguos libros de literatura francesa con anotaciones de su abuelo, que halló arrinconados y salpicados de huellas de excrementos de palomas en el desván de la Casa Museo de Salamanca.

Ana Chaguaceda indicó que la nieta del escritor, Concha de Unamuno, descubrió los libros en el desván antes de esta fecha. "Concha se asustó al ver cómo estaban los libros y se llevó algunos volúmenes que utilizó en su tesis y que envió de nuevo a la institución en 1991, cuando finalizó sus estudios y cuando el resto de los ibros ya estaban limpios", subrayó.

La máxima responsable de la Casa Museo reconoció que, en aquella época, los libros presentaban un estado impresentable y explicó que la anterior directora del centro no se puso en contacto en ningún momento con la familia de Unamuno, motivo por el cual no pudo rescatarse la biblioteca.

En la actualidad, el trastero de la casa museo continúa muy deteriorado, aunque, según la directora, para el próximo mes de diciembre está previsto el inicio de obras de reforma e todo el edificio para rehabilitarlo, ampliar la sala de investigadores y reestructurar el archivo y la biblioteca. Las obras durarán dos años.