VALLINES EVITA EN SU DISCURSO DE INVESTIDURA LA CONFRONTACION CON LOS RESTANTES PARTIDOS DEL PARLAMENTO CANTARO

- El candidato volvió a rechazar un Gobierno de coalición porque "no resistiría los efectos negativos del inminente proceso electoral"

SANTANDER
SERVIMEDIA

José Luis Vallines, candidato del Partido Popular para sustituir a Juan Hormaechea al frente del Ejecutivo de Cantabria, ha esbozado en un breve discurso de apenas 30 minutos el programa de Gobierno que prevé hasta las elecciones de mayo de 1995, en una intervención que ha estado marcada por su intento de evitar cualquer tipo de confrontación con el resto de las fuerzas políticas representadas en la Cámara.

El candidato a la Presidencia aseguró ante los diputados regionales que sus palabras no pretendían ser "la reedición de gastados espectáculos de rencillas, recriminaciones mutuas y referencias críticas al pasado. Lo que Cantabria espera oir son propuestas de futuro y soluciones a sus problemas".

Vallines pidió a los miembros de la Cámara que el debate de investidura no se convierta "en una extemporánea discsión preelectoral. No son las elecciones autonómicas, por muy cercanas que estén, el motivo que hoy nos ocupa. Flaco favor haríamos a los cántabros si convirtiéramos el debate de investidura en un acto más propio de una campaña electoral".

El presidente del PP cántabro calificó el Gobierno que propone como un Ejecutivo "de mínimos de carácter excepcional. Ofrezco un plan de actuación y un Gobierno controlado por y desde la Asamblea, manteniendo e incluso incrementando el control excepcional de la Cámaa sobre el Ejecutivo".

En su intervención, José Luis Vallines se dirigió al PSOE y a la no presenciación de condidato por este grupo parlamentario (mayoritario en la Cámara con 16 diputados), al señalar que no compartía "la sospecha de aquellos que piensan que tras esa decisión se esconden maniobras dilatorias o cálculos electorales. Estoy seguro de que el Grupo Socialista sabrá conjugar positivamente los lógicos intereses de partido con lo que es la demanda generalizada de la sociedad cántabra: conta con un gobierno cuya actuación genere ilusión y confianza en el futuro".

NO A UN GOBIERNO DE COALICION

Después de insistir en su propuesta de un gobierno de técnicos y con poco contenido político que afronte los problemas inmediatos de la región, como la falta de presupuestos, el pago de las deudas contraídas por la Diputación o los planes a financiar por la CE, Vallines rechazó la propuesta socialista de un Ejecutivo de coalición, ya que a su juicio "no resistiría los efectos negativos, inevitable pero lógicos, que sobre su funcionamiento ejercería el inminente proceso electoral".

Vallines concluyó su intervención ofreciendo un nuevo diálogo a los grupos políticos, especialmente el PSOE y el PRC, "para llevar a cabo el plan de gobierno de mínimos y cerrar definitivamente la crisis abierta por la dimisión del presidente".

(SERVIMEDIA)
23 Nov 1994
C