Según explicó Alicia de Miguel, dicho convenio, con un coste global de 96.650 euros, supone el inicio del Programa de Educación Sexual mediante el desarrollo de la primera y segunda parte, que contempla tanto las acciones formativas (talleres, conferencias, etc.) para la educación sobre la sexualidad de este colectivo, como un estudio epidemiológico para determinar el número de afectados y la situación sociológica de estas personas.

De Miguel aseguró que la tercera parte de este plan de Educación Sexual "supondrá la financiación del 30% de los medicamentos vasodilatadores a través de las asociaciones y se desarrollará próximamente a través de la firma de otro convenio".

Es un acuerdo que, señaló, "se irá ampliando progresivamente a medida que se vayan conociendo los resultados del proyecto y la demanda de los usuarios, que serán, lógicamente, aquellos discapacitados físicos que acrediten su condición de beneficiarios mediante prescripción facultativa".

La consejera de Bienestar Social dijo que este programa de educación sexual, "pionero en España", se va a desarrollar fundamentalmente en los locales de las asociaciones de discapacitados, en grupos reducidos, e irá dirigido a las personas con discapacidad física afectados por lesión medular, espina bífida o esclerosis múltiple, así como a sus parejas y familiares que pudieran estar interesados.