VACAS LOCAS. LOS PRODUCTORES DE VACUNO INSISTEN EN QUE EL BOVINO ESPAÑOL NO CONSUME HARINAS ANIMALES

- Todos os productores se reunen hoy para prever una posible caída en el consumo de vacuno

MADRID
SERVIMEDIA

Los productores españoles de vacuno aseguraron hoy a Servimedia que la carne que comercializan está libre del mal de las "vacas locas" puesto que los rumiantes españoles no consumen harinas animales, causantes de la Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB), y están sometidos a un control "exhaustivo" en prevención de cualquier enfermedad.

Además, desde el pasado 1 de octubre se cumple "etrictamente" la normativa comunitaria que obliga a separar algunas vísceras de los animales sacrificados, en las que podría transmitirse la enfermedad, y que son destinadas a la incineración.

En declaraciones a esta agencia, el gerente de Asociación de Productores de Vacuno (Aprovac), Manuel Conde, aseguró que existe una "gran preocupación" en el sector por las reiteradas noticias sobre los riesgos alimentarios para los consumidores y destacó el temor del sector a una fuerte caída en el consumo.

Las harinas de carne nunca han entrado en España y menos para la alimentación del bovino que, además, está sometido a controles alimentarios tanto en los productores de piensos como en los ganaderos", insistió.

Por ello, Aprovac y Asovac, junto con otros productores que agrupan a la mayoría del sector, se reunieron hoy en Barcelona para tomar medidas ante una eventual rebaja del consumo y lanzar un mensaje de "tranquilidad" a los consumidores de carne de vacuno de origen español.

Finalmente, respcto a la entrada en vigor de la normativa europea sobre prevención de la EEB, que se puso en marcha en España en octubre pasado, los ganaderos se quejan de que tenga un coste adicional de entre 1.500 y 2.000 pesetas por cada animal sacrificado y solicitaron ayudas a la Administración.

"No se trata de un problema de los ganaderos, sino de la salud pública, y tiene que ser costeados por las arcas públicas", dijo Manuel Conde, antes de asegurar que el coste anual podría estar en unos 30.000 millones de psetas, dado que se sacrifican 2,3 millones de cabezas de vacuno al año.

(SERVIMEDIA)
08 Nov 2000
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