VACAS LOCAS. UN JOVEN MADRILEÑO PODRIA SUFRIR UNA VARIANTE DE LA ENFERMEDAD DE LAS VACAS LOCAS, SEGUN LA SER
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Un informe médico del Hospital 12 de Octubre de Madrid, al que ha tenido acceso la Cadena Ser, considera que "no se puede descartar de forma definitiva" que un joven madrileño de 28 años sufra una variante humana de la enfermedad de las "vacas locas".
Según recoge el informe, el paciente ingresó en el Hospitl el pasado mes de mayo con un deterioro cognitivo progresivo. Los médicos subrayan que residió en el Reino Unido durante 16 meses entre los años 1994 y 1996. Este dato les hizo plantearse la posibilidad de que se tratara de la nueva variante de la enfermedad de las "vacas locas".
Tras diversas pruebas, los médicos concluyen que "la única duda diagnóstica en el momento actual es que se trate o no de la nueva variante", y por ello recomiendan "la realización de un estudio necrópsico para llegar a un dignóstico definitivo".
En declaraciones a la Cadena Ser, el doctor Alberto Rábano, miembro del comité de crisis coordinado por Mariano Rajoy, ha reconocido que "los médicos que han tratado el caso de este joven lo consideran sospechoso, aunque no hay una sospecha fuerte porque una de las pruebas que se le hicieron, una biopsia almigdalar, dio negativo".
El doctor Rábano reconoce que esta prueba almigdalar es "bastante concluyente" y que una biopsia cerebral tampoco daría unos resultados definitivo, "que sólo se pueden lograr en una autopsia cerebral, y no en todos los casos".
Por su parte, la madre del joven paciente explicó a esta emisora que la familia se negó en un principio a una prueba cerebral en vida, si bien finalmente accedió. Añadió que entonces los médicos les dijeron que no hacía falta y que era una prueba muy cara.
Ahora, la madre mantiene que, durante el tratamiento, los médicos reconocieron en varias ocasiones que podía tratarse de una nueva variante de la Creutzfeldt-Jakob y le preguntaron qué había comido durante su estancia en el Reino Unido.
La madre explicó que el joven comenzó a comportarse de forma anormal a principios del año pasado: lo veían retraído, deprimido y callado, hasta el punto de llevarle a un psiquiatra. También comenzó a temblarle una pierna y a perder la memoria. Estuvo en el hospital 4 meses y desde septiembre está en su casa, postrado en una cama y ni anda, ni habla, ni es capaz de controlar sus necesidades fisiológicas.
(SERVIMEDIA)
01 Feb 1991