Esta es la principal conclusión expresada por los expertos del Comité Científico al presentar hoy la evaluación preventiva del riesgo para la salud humana en el caso de que se detecte la enfermedad en el ganado ovino criado con piensos cárnicos.

Hasta ahora, no se han detectado casos de EEB en el ganado ovino en condiciones naturales. Sin embargo, experimentos en laboratorios han demostrado que la enfermedad pede transmitise a ciertos genotiposde ovinos y caprinos.

Además, es probable que grupos específicos de ovejas y cabras hayan sido alimentados con harinas de carne y huesos que podrían haber sido contaminadas de EEB, antes de la prohibición de este tipo de piensos.

El Comité llama la atención sobre la necesidad de mejorar e intensificar la vigilancia de los rebaños de ovinos, de introducir un sistema de identificación individual de los ovinos y de poner a punto pruebas que permitan distinguir la EEB.