Tras diversas reuniones, el pasado 18 de enero el sector productor, la Administración y gran parte de la industria y la distribución, legó a una posición común que abrió el camino para lograr que los elevados costes de eliminación y destrucción de los subproductos cárnicos no fueran pagados por el productor.

A pesar de la existencia de una Orden Ministerial que regula esta materia, Confecarne mantiene su actitud alterando el mercado cárnico nacional, por lo que CCAE defenderá los intereses de las cooperativas y no dudará en emprender cuantas acciones legales y políticas sean posibles contra aquellos establecimientos y sus Asociacions que han repercutido los costes de la retirada de las harinas cárnicas exclusivamente al sector ganadero, exigiendo el fin de esta práctica.

CCAE lamenta que la situación haya llegado a este punto y espera que Confecarne reconsidere su actitud y se preste a colaborar con toda la cadena cárnica en busca de una solución pactada y razonable que exonere al sector productor de este coste.