VACAS LOCAS. 60 MATAEROS DE CASTILLA Y LEON PARARAN EL LUNES, COLAPSADOS POR LA ACUMULACION DE DESECHOS
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Unos 60 mataderos de Castilla y León iniciarán el próximo día 8 de enero un paro indefinido para evitar el colapso de sus instalaciones por la acumulación de los Materiales Específicos de Riesgo (MER) de transmisión de la enfermedad de las "vacas locas".
Estos residuos deben ser separados de las reses en el momento del sacrificio y almacenados y custodiados por los mataderos hasta que as autoridades sanitarias los transporten a incineradoras o vertederos controlados, para su destrucción.
En declaraciones a Servimedia, el secretario general de Confecarne, Miguel Huerta, achacó el cierre a la "falta de "agilidad" de la Administración para "dar salida" a los residuos e incluso aseguró que se están produciendo problemas de higiene, que obligan a los mataderos a parar.
"Es un paro casi forzoso, para evitar problemas de salud pública, porque se trata de un material muy sensible que o se puede almacenar a la ligera", se quejó Huerta, antes de denunciar que la única planta de Castilla y León que puede incinerar estos residuos está "completamente colapsada".
El mayor problema en la acumulación de residuos ha sido la inclusión en la calificación de MER del intestino completo del ganado vacuno, lo que ha duplicado el volumen de los residuos. Además, las plantas incineradoras de residuos tendrán que destruir en breve las vacas de más de 30 meses y los animales muertos en granjas, cumpiendo así la normativa comunitaria.
Los 60 mataderos que han anunciado su cierre para el día 8 representan el 90% de los centros de sacrificio ubicados en Castilla y León, comunidad que, además, surte de carne a otras partes de España como Madrid, el País Vasco o Cataluña, según Huerta.
No obstante, el responsable de Confecarne aseguró que respaldan las medidas del Gobierno, pero insisten en que deben agilizarse los trámites, como por ejemplo la obligación de los pagos de determinadas tasas.
De hecho, los mataderos de Castilla y León denuncian que son los únicos en España que abonan tasas de sacrificio que no tienen otras comunidades, con un coste de 93 pesetas por cerdo sacrificado, entre 218 y 324 por res vacuna y de 12 a 36 por oveja.
Finalmente, Huerta criticó el modelo de certificados veterinarios impuesto a los ganaderos que llevan animales al sacrificio y precisó que no es de gran utilidad y sólo perjudica a los productores, que tienen que afrontar su coste.
(SERVIMEDIA)
04 Ene 1991
C