Para la jornada de ayer se convocó a todos los usuarios de Internet a que no se conectaran a Infovía e Internet y a dejar "colgadas", es decir, inaccesibles, las páginas "web" durante todo el día.

Según datos de la AUI, la incidencia de la huelga fue mayor a medida que avanzaba la jornada, hasta alcanzar su cotas más altas entre las 20,00 y las 23,00 horas, periodo en el que el usuario particular de Internet suele conectarsela red.

Así, el proveedor de acceso a Servicom registró un 35 por ciento menos de conexiones a todos sus nodos, mientras que Infovía registró un 50 por ciento menos de conexiones, cifra que fue aumentando conforme avanzaba la jornada, según datos de la AUI. Además, el buscador Olé, el "web" más visitado de España, tuvo un 46 por ciento de visitas menos de las habituales al mediodía.

Para el director de la AUI, Javier Solá, la huelga de ayer demuestra que "Internet no es sólo una herramiento de cmunicación académica y empresarial, sino que sus posiblidades también incluyen la movilización ciudadana".

Por su parte, el presidente de la asociación, Miguel Pérez Subías, señaló que con la jornada de ayer "se ha comprendido que detrás de los usuarios de Internet hay un colectivo de más de dos millones de personas que saben cómo comunicarse y defienden sus derechos de forma activa".

Para el próximo 23 de septiembre, la AUI tiene previsto celebrar una "gran mesa redonda" con la Administración, oeradoras de telecomunicaciones, proveedores de servicios y asociaciones de usuarios, con el fin de debatir y contrastar alternativas que mejores la situación actual.