Según fuentes universitarias consultadas por Servimedia, la UPV ha ratificado y publicado recientemente el protocolo en el boletín oficial de la comunidad, a pesar de que el mismo fue llevado a los tribunales por la Abogacía del Estado, después de que la UPV se amparase en el mismo para matricular a 57 etarras recluidos en cárceles francesas.

En este sentido, estas disposiciones sobre los reclusos han sido incluidas como un anexo a una reciente resolución de la universidad vasca que regula "la normativa de gestión para las enseñanzas de Primer y Segundo Ciclo" del curso 2005-2006. En concreto, el anexo lleva por título "Protocolo de la Universidad del País Vasco para la atención a personas internas en centros penitenciarios".

Las fuentes consultadas aseguraron que en la resolución del pasado año, en la que se regulaba el curso 2004-2005, no se hacía ninguna mención a un protocolo sobre el régimen de estudio de los presos.

FALTA DE CONVENIO

A este respecto, la portavoz del colectivo Profesores para la Libertad, Goztone Mora, explicó que la aplicación de este apartado sobre la enseñanza a los reclusos supondría entrar en conflicto con la legislación actualmente en vigor.

Esta legislación, tras la reforma pactada la pasada legislatura por PP y PSOE, implica que los presos sólo pueden estudiar en la UNED, a menos que la Dirección General de Instituciones Penitenciarias llegue a acuerdos con alguna universidad concreta.

Aunque la actual directora de Prisiones, Mercedes Gallizo, expresó al llegar al cargo su intención de llegar a un acuerdo con la UPV, éste todavía no se ha firmado y estaba siendo negociado por este centro con la Conferencia de Rectores.

A este respecto, el protocolo que ha recibido rango oficial alude a que el mismo se adecuará "a los acuerdos específicos que, en su caso, establezca la Universidad del País Vasco con la Dirección General de Instituciones Penitenciarias o con otras instituciones del Estado, de la Comunidad Autónoma del País Vasco o de alguna otra comunidad autónoma".

En cuanto a los beneficiarios de esta norma, se asegura que serán "las personas que encontrándose en tal situación especial (en la cárcel), cumplan los requisitos de procedencia administrativa exigidos para el conjunto de posible matriculación en la UPV/EHU".

Tras ser admitidos, los reclusos podrían estudiar en la universidad vasca aquellas titulaciones que la UNED oferta sólo en castellano o que no están entre la oferta de la institución estatal. Asimismo, se añade que también podrán matricularse "todos aquellos alumnos que queden adscritos al protocolo al cursar sus estudios desde centros penitenciarios sitos en el extranjero".