“Es una asignatura pendiente desde las distintas administraciones, sigue sin concebirse la prevención en el trabajo autónomo como una prioridad”, lamentó esta asociación.

En este sentido, indicó que de los 28.496 accidentes de trabajo registrados en 2020 se pasó en 2021 a 32.149. Además, destacó que solo el pasado año, los trabajadores por cuenta propia sufrieron 703 accidentes graves y, en el 74% de los casos, las consecuencias derivaron en incapacidades parciales o totales.

“El aumento de casi un 14% de la siniestralidad en el colectivo es una de las consecuencias de la relajación que se ha producido en esta materia. Es hora de retomar este asunto vital, para sensibilizar y adecuar las condiciones de los trabajos que desarrollan los autónomos con totales garantías de seguridad”, defendió UPTA.

Además, alertó de que otra de las “terribles lacras” es la situación psicológica que padecen miles de trabajadores por cuenta propia, especialmente a partir de la pandemia, lo que ha hecho, según UPTA, que se disparen los problemas psicosomáticos un 60%.

“Los autónomos de nuestro país deben desarrollar su actividad en un entorno seguro. No podemos ser la cenicienta de la prevención. Nadie debe sufrir un accidente o perder la vida en su puesto de trabajo, es inadmisible. Pero solo podemos combatir esta lacra a través de la formación y la concienciación, y en ese empeño de sensibilización volcaremos nuestros esfuerzos.”, remarcó el presidente de UPTA, Eduardo Abad.