Otao, además de jefe del Ejecutivo tripartito compuesto por su formación, Convergencia de Demócratas Navarros y Eusko Alkartasuna, es el secretario general del PSN-PSOE, cargo al que accedió el pasado año, tras la salida de la dirección socialista de Gabriel Urralburu.

Miguel Sanz indicó en este sentido que debe ser el Parlamento el que manifieste su confianza o no a Otano, presidente de la Comunidad Foral desde el pasado septiembre. En caso de no lograr la confianza, según UPN, Javier Otano debiera presntar su dimisión.

Pese a esta propuesta, Sanz no se mostró favorable en principio a presentar una moción de censura parlamentaria, a la espera de próximos acontecimientos sobre la trama Urralburu y, una vez sea levantado el secreto del sumario, conocer la existencia o no de alguna implicación en este caso del PSN-PSOE.

Para UPN, existe un rechazo generalizado a que la presidencia del Gobierno de Navarra esté en manos del actual secretario general del PSN-PSOE, partido que, en opinión de Miguel Saz, está salpicado por la corrupción.

El portavoz regionalista puso como ejemplo uno de los capítulos de la instrucción del caso Urralburu. Según han declarado diversos testigos de la causa, dos encuestas electorales que en su día encargara el entonces presidente socialista fueron pagadas por la empresa Vela, propiedad de Juan José Jové, también dueño de Promociones Roteñas.

Miguel Sanz indicó que conoció esas encuestas porque se lo comunicó un militante socialista. Si la base del PSN supo de dichs encuestas, Sanz se mostró convencido de que también conocían su existencia los dirigentes del PSOE en Navarra.

Por último, el portavoz de UPN calificó de "tremenda frivolidad" el viaje que estos días realiza Javier Otano por Chile y Argentina, "en vez de hacer frente a la situación" política desencadenada tras los encarcelamientos de Gabriel Urralburu y Antonio Aragón.