"Nos preocupa la actitud del Gobierno cuando hace de la cohesión una discusión sobre el fondo que se transfiere a España, y no del principio que debe guiar a la UE y todas sus políticas, en especial la AC (...) Dudamos de que el Gobierno quiera realmente aplicar el principio de cohesión en la PAC y nos preocupa también la falta de transparencia", señala un comunicado de UPA.

Esta organización agraria sostiene que, ante un inevitable control en el gasto comunitario, la solución no puede ser nunca la cofinanciación entre los distintos países, puesto que los agricultores de las naciones más ricas saldrían beneficiados.

La solución, a su juicio, es la distribución más justa de las ayudas entre los roductores que más lo necesitan, en función del tamaño de su explotación, del trabajo que generen y del territorio rural en que se encuentren, pero con independencia del país al que pertenezcan.

Para esto se debería aplicar un principio de modulación que redistribuyera el gasto sin incrementarlo. "La cohesión como tal no tiene por qué generar gasto presupuestario si se aplicara este principio en la formulación de todas las políticas comunes", argumenta UPA.