Según explicó en rueda de prensa el diputado socialista Jaime Lissavetzky, el desvío se habría producido mediante una transferencia de crédio que firmó en octubre el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, proveniente de un dinero que los Presupuestos del Estado tienen asignados a "becas de formación, perfeccionamiento y movilidad de profesores".

El parlamentario del PSOE aseguró que su formación no se opone a que la ANECA tenga un inmueble nuevo, pero considera escandaloso que el Gobierno utilice fondos europeos para ello sin ni siquiera dar cuenta de ello al Parlamento.

Afirmó que este hecho es uno más de una larga cadena de anomaías que están salpicando desde su nombramiento la gestión del director de la agencia, Ismael Crespo, y que deberían haber provocado hace tiempo ya su dimisión.

Lissavetzky aseguró que su grupo ha planteado al Gobierno 14 solicitudes de información sobre diversos aspectos de la ANECA como el sueldo de Crespo, los viajes que ha realizado éste al extranjero con cargo al erario público o los vehículos a disposición de la agencia. En todos los casos, dijo que la respuesta del Ejecutivo ha sido el silencio. Agregó que el PSOE intenta en vano realizar una "auditoría" de lo que está pasando en la ANECA, pero el departamento de Pilar del Castillo se lo impide. Por eso, anunció que no descartan acciones de carácter judicial para arrojar luz sobre la gestión de la agencia.